En ella, su rival sería el suizo y ex número uno del mundo Roger Federer, lo que significaría el enfrentamiento número trigésimo quinto entre ambos, con un balance a favor del español de 23-11 y también su novena final de Grand Slam entre ambos con balance favorable a Nadal 6-2, siendo su última final en Roland Garros 2011 con triunfo para el balear en cuatro mangas. Esta fue su séptima derrota en la final de un torneo de Grand Slam, la tercera en Australia y también la primera vez que perdió ante Federer en Grand Slam desde Wimbledon 2007 (10 años).